No solía usar su primer nombre, por lo que todos lo conocían como Antonio. Además de su vida dedicada a la Universidad, se daba el tiempo para actividades sociales y culturales, como la Sociedad Chilena de Amigos de la Ópera, de la cual fue uno de sus directores; esta actividad, entre los agrónomos, le valió el apodo de “ El Conde”. Amante de los viajes, recorrió gran parte del planeta; en la última década, después de terminar su decanatura, era casi imposible saludarlo para su cumpleaños (julio), ya que siempre estaba fuera de Chile. Irónico es que el último día de su vida fuera en el aeropuerto de Miami.
Cursó su educación secundaria en el Instituto Nacional; se tituló de Ingeniero Agrónomo en 1962, mención Fruticultura, en la Facultad de Agronomía de la Universidad de Chile; ayudante del curso Fruticultura General desde 1960; en 1963 obtuvo la Beca Emery H. Powell, (Instituto Internacional de Educación) y cursó el Master of Science in Horticulture, con especialidad en poscosecha de frutas, en Washington State University (1965; Pullman, Washington, EE.UU.). En 1966, de vuelta en Chile, es contratado a tiempo completo por la Facultad de Agronomía de la Universidad de Chile, como contraparte de los especialistas en fruticultura de la U. de California y participa activamente en el Convenio Universidad de Chile- Universidad de California. En 1967, creó el primer curso sobre manejo, calidad y fisiología poscosecha de frutas en Chile, que lo desempeñó anualmente hasta su retiro; el mismo curso lo implementó y dictó en la PUC hasta 1986. Entre 1970 y 1974 efectuó estudios de doctorado en la Universidad de California Davis; recibiendo en 1975 el grado de Phylosophal Doctor in Botany (Ph. D.). Se reincorporó a la Facultad de Cs. Agrarias y Forestales de la U. de Chile, siendo designado director del Departamento de Producción Agrícola, desempeñándose hasta 1980. Fue creador y director del Centro de Estudios Poscosecha (CEPOC). Entre 1980 y 1986 se incorpora tiempo completo a la Facultad de Agronomía de la Pontificia Universidad Católica de Chile, para desarrollar el laboratorio poscosecha, iniciando la investigación de la disciplina en esa Universidad; en 1984, la PUC lo designó Profesor Titular. En diciembre de 1986 volvió a la Universidad de Chile, siendo elegido decano para el periodo 1986-1990, el primer decano electo desde 1973, logrando una tranquila transición a nuestra actual democracia. En 2006 asume su segundo periodo como decano, siendo reelecto en 2010, hasta 2014, habiendo cumplido tres periodos en el cargo.
Además de ser experto en fruticultura y poscosecha, demostró una gran capacidad en la administración universitaria, desempeñando múltiples cargos y seleccionando a sus colaboradores sin discriminación de ningún tipo. También, siempre tuvo tiempo para el gremialismo y la ciencia; fue presidente de la Sociedad Agronómica de Chile (SACH), miembro del directorio del Colegio de Ingenieros Agrónomos A.G. y socio fundador de la Academia de Ciencias Agronómicas. En la Universidad, en 1988, participó activamente en la “la rebelión de los decanos”, que fue un factor más que terminó con la destitución del Rector designado José Luis Federici. En 1978, como presidente de la SACH, transformó las jornadas agronómicas en un congreso anual, y renovó la revista Simiente; el mismo año la SACH realizó la primera reunión internacional.
Adicionalmente, organizó cinco simposios internacionales de Manejo, Calidad y Fisiología Poscosecha de frutas, con el patrocinio de FONDEF, FAO, FEDEFRUTA, la Sociedad Agronómica de Chile (SACH), la Red Iberoamericana de Tecnología Postcosecha (RITEP) y la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA). Dirigió 16 proyectos de investigación con fondos concursables, CORFO, FONDEF, FONDECYT, FIA y privados.
En 1989 es designado representante de Chile ante la RIAC (Red Inter-Americana de Cítricos), para asistir a la reunión preliminar en Montevideo, Uruguay, y en 1990 fue presidente de la comisión organizadora de la RIAC en la sede de la FAO-RELAC. Entre 1978 y 1993, desarrolló cursos, charlas y seminarios en 21 países de América Latina, el Caribe, España y Egipto. Entre 2002 y 2006 fue director de la Escuela de Posgrado de la Facultad de Ciencias Agronómicas de la U. de Chile. Durante sus 40 años de vida académica públicó más de 150 trabajos de investigación y 15 informes internacionales, a FAO, OEA, Acuerdo Cartagena, USAID y Federcafé (Colombia).
Recibió diversas distinciones, entre otras: en 1989 el Premio Carlos Porter del Colegio de Ingenieros Agrónomos, por su actividad científica; en 1995 el Premio al Mérito Agronómico de la SACH, en reconocimiento a su contribución en poscosecha de frutas y hortalizas en América Latina; en 2002 el premio de la Asociación Iberoamericana de Tecnología Postcosecha, en reconocimiento a las contribuciones en poscosecha de frutas y hortalizas en Iberoamérica; en 2004 el Premio Medalla Agrícola Nacional, del IICA y el MINAGRI de Chile; en 2005 la Medalla al Mérito Académico Rector Ruy Barbosa, Fac. de Cs. Agronómicas, U. de Chile; en 2010 el reconocimiento de la Sociedad Interamericana de Horticultura Tropical por su valerosa y dedicada contribución a ésta; en 2012 la Espiga de Oro, del Colegio de Ingenieros Agrónomos, por trayectoria profesional, y el Premio FEDEFRUTA, por la contribución al desarrollo de la fruticultura nacional, y en 2016 el reconocimiento por años de servicios distinguidos en investigación y docencia en poscosecha, en el VIII International Symposium ISHS (International Society for Horticultura Science), realizado en Cartagena, España.
Hasta siempre Profesor gracias por todo lo que nos dio y por dejarnos a sus hijas Rosario y Francisca además de sus tres nietos de los cuales siempre nos hablaba con gran orgullo