Universidad de Chile
Ir al contenido
MENÚ
Ir al contenido

Vinculación con el Medio

Estudiantes de Campus Sur ganan fondo sudamericano de Humedales Costeros

Estudiantes Campus Sur ganan fondo sudamericano de Humedales Costeros

La iniciativa para la conservación de humedales costeros y aves playeras en la Costa Árida-Semiárida del Pacífico Sudamericano por segundo año consecutivo abrió la convocatoria para proyectos de Ecuador, Perú y Chile. Estudiantes de Ingeniería en Recursos Naturales y de Ingeniería Forestal se adjudicaron el fondo con su propuesta para proteger un humedal en San Antonio, Región de Valparaíso.

La expansión portuaria es la principal amenaza de Ojos de Mar, un humedal de 52 hectáreas de superficie que se encuentra en la ribera norte de la desembocadura del Río Maipo en la comuna de San Antonio, Región de Valparaíso. Alberga biodiversidad típica de la zona, donde se cuentan más de 100 tipos de aves, como el Pilpilén, una pequeña especie playera que anida en sus dunas y que, por la intervención humana, la contaminación y el paso de vehículos, ha visto seriamente afectada su reproducción.

María Jesús Sepúlveda, recién titulada de Ingeniería Forestal, junto a Paula Vidal, Javiera Mahan y Matías Maulén, estudiantes de Ingeniería en Recursos Naturales Renovables, viven en las comunas de San Antonio y Llolleo en la Región de Valparaíso y han visto cómo vecinas y vecinos intentan proteger los humedales y su biodiversidad de su desaparición. Con motivación personal y profesional, se unieron a la organización “Ojos de Mar” que por estos días cumple dos años trabajando por la conservación del humedal.

“Ojos de Mar ha sido un ejemplo para las otras organizaciones de la zona. La red ambiental del Litoral Central se levantó para centralizar la información y apoyarse con capacitaciones y con experiencia para generar acciones más concretas de defensa. Son organizaciones no formales, pero que llevan harto tiempo intentando conservar. Faltan herramientas, pero entre los mismos integrantes de la organización hemos postulado a proyectos para tener más recursos e instalar más acciones de conservación con la comunidad”, sostiene María Jesús Sepúlveda.

Vecinas y vecinos de la zona muestran mucho entusiasmo por participar en las diversas iniciativas de conservación de la naturaleza porque conocen de cerca la amenaza constante que la expansión portuaria y el descuido humano están generando sobre el ecosistema. Esto motivó a que Javiera, Paula, Matías y María Jesús, junto a Liliana Plaza, atleta y activista ambiental local recientemente rankeada en los premios Latinoamérica Verde 2021 por el proyecto de educación ambiental “Ojos de Mar” y Pablo Malhue, destacado biólogo y docente del Instituto Comercial de San Antonio, elegido entre los 5 profesores del año por Global Teacher Prize 2020, postularan al fondo de la iniciativa sudamericana Humedales Costeros.

“Ojos Costeros: Empoderamiento local para la conservación y recuperación de Humedales Costeros en la provincia San Antonio” es el nombre del proyecto con el cual este equipo de la organización “Ojos de Mar” se adjudicó una de las 10 plazas disponibles para iniciativas en Ecuador, Perú y Chile.

“Hay una fuerte vinculación con el territorio a través de las organizaciones que defienden la naturaleza y se preocupan por la conservación de esos ecosistemas. Se hizo una votación, cerca de 22 mil personas participaron, de un total de 100 mil.  El 97% estuvo de acuerdo con la declaración de santuario del humedal, esto es muy importante porque da cuenta de que hay una consciencia de que este espacio tiene valor para la ciudadanía. Hay que encontrar el vínculo entre las organizaciones territoriales y los gobiernos locales, es importante hacer estos nexos. Y nuestro aporte va a ser relevante para tener argumentos para que estos nexos tengan sustento”, destaca Javiera Mahan.

Paula Vidal, por su parte, plantea la necesidad de rescatar la identidad local y conectarla con la naturaleza. “¿Queremos seguir siendo una zona portuaria solamente o nos consideramos como una zona de alto valor de biodiversidad? Por esto debemos relevar su importancia y educarnos y aprender sobre el rol que cumplen estos ecosistemas en la naturaleza. También como sentido de pertenencia, por eso es algo que queremos mantener y conservar, por su valor ecológico. Estos lugares permiten esparcimiento y contacto con la naturaleza. Hay un significado con las culturas ancestrales, el humedal se usa como un espacio ceremonial y está también asociado a los pescadores artesanales, que históricamente han desarrollado su actividad económica en la desembocadura del Río Maipo”.

Puesta en marcha

El proyecto Ojos Costeros surge de la articulación entre la Corporación de Desarrollo de Llolleo (CORDELL), y “Ojos de Mar”. Juntos han impulsado acciones de conservación con alta participación y compromiso ciudadano. Por ejemplo, cuenta el equipo de la iniciativa, por dos meses cuidaron familias de pilpilenes, desde su anidación. Nueve huevos eclosionaron y cuatro aves llegaron a su etapa juvenil.

 “Hay mucho movimiento en el puerto, las instalaciones están muy cerca. Transitan camiones las 24 horas del día. Todo esto representa un peligro latente para cualquier especie que esté en la zona.  Y estos impactos son los más evidentes, pero hay un montón de efectos que son más invisibles en el diario, pero que son invasivos para la comunidad como la contaminación sonora y lumínica”, explica Javiera Mahan.

Esta motivación comunitaria es el principal motor de la iniciativa Ojos Costeros que, a través de dos ejes principales: educación ambiental, y difusión y capacitación, busca continuar promoviendo la valoración del ecosistema del humedal, configurado como un hotspot chileno para la biodiversidad, un sitio de gran importancia para la red hemisférica de aves playeras tanto locales como migratorias, para su descanso y reproducción, y también brinda ambiente para el forrajeo.

“Tenemos consideradas capacitaciones a docentes para implementar en la malla curricular de tercero medio estos contenidos sobre humedales. Se va a generar documentos con secuencias didácticas, como material para educación ambiental. También estamos con artistas locales, con los que se realizarán obras de teatro y esculturas. Por ejemplo, se va a hacer un pilpilén con plástico recogido de la limpieza, y diez murales comunitarios sobre las aves en diferentes puntos de ambas comunas”, afirma María Jesús Sepúlveda, quien también es ilustradora.

El proyecto considera, además, realizar geolocalización y levantamiento de información sobre humedales costeros poco conocidos en la provincia. Realización de cápsulas de videos, sobre educación ambiental, y de talleres ya sea presenciales o a distancia para organizaciones y comunidades locales tales como “Reconocimiento de aves que habitan en humedales costeros y uso de plataformas de ciencia ciudadana E-bird y iNaturalist”, “Acciones de conservación y monitoreo en Humedales costeros” y el “Taller de fotografía de la naturaleza”, este último realizado por Rodrigo Vega.

Además, entre las metas se encuentra la elaboración de un informe con propuestas de manejo y/o recuperación de los humedales en conjunto con los actores territoriales involucrados, con el fin de levantar información que sirva como insumo para gestionar acciones relacionadas a la conservación, tales como declaraciones de humedales urbanos.

“Ya existe una red de humedales del litoral central y a través de ese espacio es que queremos presentar la propuesta a las organizaciones para que se unan al proyecto. Y nosotros sumarnos a las acciones de conservación que estén impulsando. Muchas veces por recursos quedan atrás y se necesita como estudio de especies, y queremos aportarles con nuestras especialidades y conocimiento técnico”, añade Paula Vidal.

Este proyecto es un punto de encuentro de diversas identidades locales y nacionales a través de sus actividades, donde destaca el apoyo de Magíster en Didáctica de las Ciencias Experimentales de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV) y el Centro de Investigación en Didáctica de las Ciencias y Educación STEM-PUCV (CIDSTEM) donde Pablo Malhue se encargará del diseño de secuencias para la educación ambiental en humedales, y trabajará con docentes de la provincia en la contextualización de actividades de ciencia ciudadana territoriales en el currículum escolar. Además, destaca la colaboración de organizaciones como la ONG Geología Urbana y Bestias del Sur Salvaje,  las cuales expondrán en un seminario virtual sobre la conservación de la cuenca del Río Maipo.

Para más información de la iniciativa Ojos Costeros se puede seguir su cuenta de Instagram o solicitarla a través del correo electrónico ojoscosteros.cl@gmail.com.

Galería de fotos